Trabajar con levadura comercial no es un pecado y tiene muchos beneficios si la sabemos utilizar correctamente. La levadura se alimenta de los azúcares del almidón de las harinas y da como resultado dióxido de carbono y alcohol. El alcohol se evapora durante la cocción y el CO2 es el responsable de hacer crecer la masa, es el aire que queda retenido y que forma la miga, por eso la importancia de desarrollar bien el gluten para que pueda contenerlo.
Los prefermentos son ideales para aportar complejidad de sabores porque amplían el tiempo de fermentación si lo comparamos con la incorporación directa de levadura a las masas. Dentro de los beneficios que tienen dan migas más livianas, cortezas más finas, y sabores menos ácidos en comparación a la utilización de masa madre.
Consisten en agua + harina + levadura y se clasifican dependiendo la cantidad de líquido que contengan. La cantidad de levadura que se emplee depende del tiempo en que se quiera que esté listo, aunque de todas maneras siempre utilizar poca es la mejor opción, ¿porqué? Porque el objetivo es sacar los sabores del cereal y no de la levadura. Si se utiliza levadura en exceso la masa crece muy rápido, se agotan los azúcares y aparece un sabor a alcohol que no es lo que se busca, por eso la importancia de fermentaciones largas y controladas.
A mi me gusta combinarlos con la MM para tener lo mejor de los dos mundos, pero también son ideales para quienes no tienen masa madre y están buscando mejorar sus recetas.
Para hacerlo simple vamos a dividirlos en sólidos y líquidos, dentro de los sólidos están la biga y cucharón, masa ácida o pâte fermentée y en los líquidos están el poolish y la esponja
Cucharón: se puede hacer como si fuera una masa más o bien se obtiene retirando una parte de la masa de pan ya fermentada. Es un método que se utiliza en varias panaderías para mejorar los panes y es súper sencillo porque solo se retira x cantidad de masa antes de formar los panes y se conserva para incluir al amasado del día siguiente.
Para hacerlo desde cero aquí esta la receta:
140 gr de harina de trigo panadera/ 000
una pizquita de levadura fresca
90 gr de agua templada
Se mezclan todos los ingredientes y se amasan por unos minutos. Se coloca la masa en un tupper aceitado y cerrado y se deja fermentar hasta que duplique su volumen. Una vez que haya crecido se desgasifica (quitar todo el aire presionándola) se amasa un poquito más, vuelve al tupper, se tapa con film y al frío hasta el día siguiente que se incluye en la masa.
Este prefermento da como resultado masas fuertes y cortezas crocantes.
Biga: es un prefermento de origen italiano con una hidratación alrededor del 40/50% que se amasa muy poco (de hecho no es necesario que absorba toda la harina) y fermenta por al menos 12 hs. Es bastante “dura” y la diferencia principal con el cucharón es que al llevar menos agua y trabajarse menos no se acidifica mucho, se evita la degradación de la proteína y necesita más tiempo para madurar y estar en su mejor punto para utilizarla. Los beneficios son panes con más volumen y muy aromáticos.
Receta:
100 gr harina panadera/ 000
40/50 gr de agua
Menos de 1 gr de levadura fresca (un pizquita)
Mezclar todos los ingredientes y colocar en un tupper cerrado, dejar que fermente unas cuantas horas.. los pedacitos de masa deben verse hinchados y si se abren se ve como miga de pan.
Poolish: consiste en misma proporción de agua y harina y un poquititito de levadura (0,25% con respecto a la cantidad de harina), que se mezcla hasta que no haya grumos y se deja fermentar. Para identificar si está listo solo basta con mirar el volumen, tiene que haber duplicado y la superficie debe estar rugosa y llena de burbujas. Si se “paso” y comenzó a caer, no hay problema, se puede utilizar igual.
Lo ideal es que fermente por al menos 12 hs para que aporte el sabor dulce natural que tiene a los panes. Las mejoras que da son: migas más húmedas, mejor alveolado, cortezas finas y mejora la expansión en el horno.
Es el prefermento francés por excelencia y se emplea en la elaboración de baguettes.
Receta:
100 gr de harina panadera / 000
100 gr de agua
1 gr de levadura fresca (una pizquita)
Se mezcla todo en un tupper, se tapa y se deja fermentar hasta que duplique su tamaño. Se puede refrigerar y conservar por 1 o 2 días.
Aquí pueden encontrar el video de cómo hacerlo.
Esponja: es el más rápido y consiste en amasar hasta tener un desarrollo medio del gluten una parte de la harina con el 50% del agua o los líquidos de la receta y el 100% de la levadura. Se deja fermentar hasta que doble el volumen y se vuelve a amasar con los ingredientes restantes de la receta.
Se utiliza mucho para masas dulces: bollos, brioches, le da estructura y fuerza y reduce el tiempo de amasado.
Ejemplo de receta:
250 gr de harina panadera/ 000
175 gr de agua
0,5 gr de levadura
Amasar y dejar fermentar hasta que duplique
Masa final:
425 gr esponja
250 gr de harina panadera/ 000
200 gr de agua
9 gr de sal
Aunque cada prefermento es ideal para cierto tipo de elaboraciones todos los se pueden sustituir entre si, hay que tener en cuenta la hidratación final de cada receta para compensar.
El poolish es ideal para baguettes, la biga para pizzas o focaccias, el cucharon para panes integrales y la esponja para masas dulces.
Para escribir este posteo consulté los libros: El aprendiz de panadero de Peter Reinhart y La revolución del pan de Jordi Morera, que si tienen la posibilidad de comprarlos se los súper recomiendo, son biblias panaderas.
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